Rocketman: retorno al Mini más clásico
El desarrollo de los vehículos eléctricos, aunque imparable, es lento. Así que, inmersos en una crisis económica que nadie sabe cuánto va a durar todavía, el interés por los vehículos premium está viviendo un momento dorado. En concreto, las grandes estrellas del momento son los pequeños coches eficientes como el Audi A2 renovado que está a punto de ver la luz.
En otras palabras: todo indica que en lugar de una avalancha nuevos modelos eléctricos o híbridos, lo que vamos a ver en los próximos años son coches convencionales con motores redimensionados, en un esfuerzo por mantener la eficiencia y reducir los costes. Es el caso de BMW, que va a lanzar una versión actualizada de su sorprendente Mini Rocketman concept que pudimos ver en el pasado Salón de Ginebra.
El «apellido» Rocketman alude al tamaño reducido de este modelo, incluso para los cánones habituales del Mini. Se podría decir que es un retorno a las dimensiones del Mini clásico, aunque con un deslumbrante equipamiento tecnológico de última generación.
Más Mini que nunca, este coche quiere ser la definitiva solución urbana para el conductor en las grandes ciudades. Elaborado a base de fibra de carbono reforzada con plástico, no descuida la estética y cuenta con un techo de vidrio que cubre toda la superficie bordeado por una franja metálica pintada de rojo.
Por desgracia se desconoce aun qué motor impulsará al Mini Rocketman, tal vez una versión de la última generación de motores de tres cilindros que BMW ya ha desarrollado en algunos Mini como el Inspired by Goodwood o el Baker Street. De momento es un secreto bien guardado que saldrá a la luz este mismo verano cuando el coche salga al mercado, haciendo coincidir la fecha del estreno con la del inicio de los Juegos Olímpicos de Londres. Trucos de marketing.